Das Erlernen der häufigsten deutschen Wörter durch extensives lesen auf dem a Sprachniveau und dessen Einfluss auf die Lesekompetenz

Abstract

Uno de los mayores desafíos en el aprendizaje de lenguas extranjeras es adquirir la capacidad de leer textos auténticos, ya sea por necesidad o por placer. Es hasta cierto punto evidente que el conocimiento de vocabulario es esencial para el desarrollo de la comprensión lectora: a mayor conocimiento de vocabulario, menor dificultad para entender un texto. Por otra parte, y contrario a lo que se solía pensar hace unas décadas, conocer el 70% de las palabras contenidas en un texto no es suficiente para poder comprenderlo: estudios han demostrado que para ello es necesario conocer mínimamente el 95% (Schmitt 2008). Según Tschirner (2006) las 4000 palabras más frecuentes del alemán cubren un promedio del 87.1% del vocabulario incluido en un bestseller, mientras que tan sólo el 80.7% de un texto especializado. Esto nos da una idea de la importancia de aprender y enseñar de manera directa e indirecta este vocabulario. Por otro lado, aunque investigaciones han comprobado una fuerte correlación entre el conocimiento de vocabulario y la habilidad lectora, la mayoría de estos estudios se han enfocado en el aprendizaje de inglés como lengua extranjera (cfr. Hacking/Tschirner 2017, p. 500). Existe por lo tanto una brecha de investigación en cuanto a estudios que se concentren en otras lenguas. El objetivo de esta investigación ha sido tratar de descubrir si existe una relación entre la lectura extensiva y el aprendizaje de las palabras más frecuentes del alemán, así como su posible repercusión en la comprensión lectora. El estudio consistió en dividir una clase del nivel A2.1 de alemán en un grupo de control y otro experimental. Los grupos finales los conformaron siete y seis sujetos respectivamente. Con el propósito de obtener información acerca de sus hábitos de lectura, ambos grupos respondieron una encuesta. Después presentaron un test de vocabulario receptivo del idioma alemán (Wortschatztest Deutsch Rezeptiv) y un test de comprensión lectora (Reading Proficiency Test). Posteriormente el grupo experimental leyó de manera extensiva lecturas simples pertenecientes a los niveles A1 y A2 a lo largo de seis semanas, entregando un reporte semanal de lectura en el que anotaban el título de la lectura, el grado de interés que les despertaba, su grado de dificultad, número de palabras consultadas en el diccionario, el tiempo dedicado a la lectura, entre otros datos. El tiempo diario de lectura recomendado eran 30 minutos o más, sin embargo también podían registrar 10 o 20 minutos. Además, si una lectura les parecía difícil o poco interesante podían cambiarla por otra. Después de seis semanas ambos grupos volvieron a presentar las pruebas de vocabulario y comprensión lectora, y finalmente el grupo experimental respondió una encuesta a cerca de la experiencia de dedicar diariamente tiempo a la lectura. Los resultados de las pruebas de vocabulario del grupo experimental no arrojaron diferencias significativas que indiquen un mayor aprendizaje de las palabras más frecuentes del alemán a través de la lectura extensiva durante un periodo de seis semanas. En cambio, los resultados de las pruebas de comprensión lectora mostraron cierta mejoría en este grupo. Por último, es importante señalar la necesidad de repetir estudios como este con una mayor muestra y variables como más semanas de lectura extensiva, que aporten mayor evidencia en lo que respecta a este tema.